Latest Entries »


 

Resultado de imagen para obra josé luis cuevas

 

En 1996 yo hacía mis pininos en los medios de comunicación realizando un programa de radio para Radio y Televisión de Hidalgo, en Pachuca. Por el tipo de programa de corte musical/ juvenil en general las entrevistas que realizaba eran siempre a personajes de la farándula. Desde mis épocas en la universidad, no recuerdo haber sentido algún tipo de nerviosismo teniendo conversaciones con personalidades importantes de diversos ámbitos, menos aún con la gente del espectáculo cuya celebridad me parece en la mayoría de los casos, un poco fatua. Fue por ello que tomé la iniciativa de llevar a la estación de radio conversaciones con personajes realmente trascendentes para la vida de México. Mi interés en ese 1996 fue sobre cuatro personajes que desde mi óptica sí habían penetrado e incluso transformado la vida nacional de forma contundente: Octavio Paz, Amparo Montes, Lucha Villa y José Luis Cuevas. Conseguir la manera de contactarlos fue labor nada fácil tomando en cuenta que en ese tiempo la información no circulaba de forma tan digamos, banal como hoy en día. Finalmente logré con la ayuda de una amiga contactar y hacer entrevistas con Amparo Montes (una artista de verdad) y con Lucha Villa. Aunque logré hablar personalmente vía telefónica con Octavio Paz él no tuvo interés alguno por regalarnos la conversación mostrándose incluso desconfiado y cortante (pese a todo hoy puedo decir que al menos siendo muy joven pude hablar por teléfono con un premio Nobel).

El caso de José Luis Cuevas fue muy distinto. A pesar de que mi medio no era el más importante y yo sí el más inexperto, él accedió a recibirnos en su estudio en San Ángel.  Por primera vez estaba nervioso de encontrarme con el mítico, el favorito de los medios de comunicación, el que dibujaba los submundos, la persona que (supuse) seguramente estaría cubierto de excentricidad, l’enfant terrible: José Luis Cuevas.

Al llegar a su casa-estudio nos abrió la puerta una persona de servicio y luego de entrar apareció frente a nosotros un hombre elegante, de finas maneras, guapo y lo más sorprendente, un hombre amable que nos condujo al primer piso de esa casa, nos dirigíamos hacia el lugar más íntimo del artista, al estudio del pintor. Desde luego él notó nuestra inexperiencia y pese a ello, mantuvimos una muy larga conversación que me atrevo a decir disfrutó mucho donde nos habló de sus inicios en la pintura, de su rebeldía, de sus correrías con mujeres, del sexo, de su profundo deseo y esfuerzos por lograr apertura y renovación de la plástica mexicana, de su pavor a las enfermedades, de las enemistades que esos esfuerzos le trajeron, de algunos encontronazos con el sistema político, de su relación con pintores como Picasso e intelectuales como Carlos Fuentes, de sus viajes, de su cercanía con Monsiváis, de su experiencia juvenil de exponer en Nueva York. Nos mostró algunos de sus trabajos, su tan mencionada cama colocada en una zona estratégica de su estudio… Fue una conversación realmente extensa y amena dirigida por un extraordinario conversador que disfrutaba cada anécdota, cada palabra con un lenguaje muy rico que denotaba a un hombre de extraordinaria cultura. Al principio de la conversación yo no podía creer que estuviera siendo tratado como un profesional y con una familiaridad tan peculiar por un hombre tan rico en experiencias y tan artista; posteriormente yo no lograba concebir que un hombre que en sus dibujos daba tanta luz a mundos oscuros como los prostíbulos, los enfermos mentales, los sádicos poseyera tal nivel de generosidad y sobre todo, que en cada una de sus anécdotas hiciera referencias a su vida familiar… a Bertha… a sus hijas… a México. Tal parecía que en su presencia estaba manifiesta la presencia de sus cariños, él formado por otras entidades.

Luego de varias horas de charla decidimos concluir la visita. Durante la despedida vino la anécdota más relevante de esta experiencia y que creo, define en mucho al artista, al personaje mediático y a la persona. Era ya tarde y él nos preguntó si teníamos forma de regresar a Pachuca, -de no ser así – dijo -pueden quedarse en casa-. Le agradecimos su amabilidad y regresamos a Pachuca pero con una percepción distinta del personaje: Él era el receptáculo de sus amores, sin ellos él estaba desarticulado y además, su excentricidad no residía en historias fantásticas, un ardiente deseo de aferrarse al pasado prehispánico o ser devoto de alguna ideología como Diego y Frida, no. Su excentricidad estaba en su nivel de apertura hacia lo desconocido (tan desconocido como quien lo entrevistaba), pareciera que gozaba el hecho de lanzarse al placer del descubrimiento.

Desde 1996 a la fecha he tenido oportunidad de conversar y conocer a personalidades importantes (unas más medianas que otras) pertenecientes a diversos ámbitos de la vida de México y una característica en la mayoría de todos ellos es la arrogancia e incluso soberbia que nubla sus talentos. Así que desde entonces, 1996 hasta el día de hoy sigo recordando la gentileza, amabilidad, sentido de lo familiar y cordialidad detrás del gran artista plástico, del hombre que redireccionó las artes plásticas mexicanas, un trabajador incansable que logró poseer una obra muy basta y de un personaje que disfrutaba derribar tabúes. Indudablemente desde entonces cuando escucho el nombre de José Luis Cuevas no sólo viene a mi mente un artista genuino, viene también la imagen de la gentileza del ser humano. Él se convirtió en mi referencia para calificar a alguien como un Gran personaje juzgando no sólo su trabajo sino el nivel de trato con las personas. En la pintura él es y será l’enfant terrible pero desde mi punto de vista y experiencia en el trato personal yo lo llamaría l’enfant agréable.

 


 Resultado de imagen para marcha anti trump

Luego de la marcha convocada por varias organizaciones civiles de nuestro país  invitando a los mexicanos a expresar nuestro repudio contra las ofensas de que ha sido objeto México por parte del presidente estadounidense, el día de ayer escuché la incomodidad por parte de varios de los convocantes al hacer su balance del mal resultado obtenido y no sólo me sorprendió que muchos de nuestros «opinólogos» se quedan muy cortos al analizar el momento actual de la sociedad mexicana sino me incomodó también su molestia acusando a los mexicanos de pasmados, faltos de entendimiento ante la amenaza externa que se cierne sobre nosotros (tontos para resumir), estancados en aquella sociedad mexicana que vivió las intervenciones francesa y norteamericana donde preferimos culpar a factores internos estos episodios trágicos de la vida nacional (creo que el portavoz de esta acusación quiso llamarnos retrógradas pero no quiso ser políticamente incorrecto y traducir correctamente su pensamiento).

En mi opinión creo que para empezar muchos de estos «opinólogos» no sólo pertenecen a una élite que se ha adjudicado el poder de juzgar las acciones de quienes no estamos de acuerdo con sus planteamientos ni sus posicionamientos políticos; además, han sido muchos de ellos quienes han satanizado una y otra vez la manifestación pública en las calles censurando las protestas espontáneas como expresiones de rijosidad (muchos de ellos viven como si habiera sucedido ayer la toma de Paseo de la Reforma por AMLO aunque ya se les olvidaron los miles de muertos de la administración de Calderón que nos persiguen diez años después con más muertos y fosas clandestinas en varias regiones del país y se hacen de la vista gorda ante los actos de corrupción de muchos miembros del PRI, faltas de ambas administraciones que según entiendo para ellos son menos graves que la toma de una avenida emblemática pero no la más transitada de la CDMX). Creo también ellos mismos ponen en evidencia la falta de credibilidad que tienen muchas de estas organizaciones civiles debido a la falta de resultados que han dado puesto que insisto, los niveles de corrupción y de violencia en el país no merman en lo absoluto. En síntesis, no tienen liderazgo porque no han probado la suficiente eficacia en sus resultados aunque debemos reconocer que sus propósitos son bastante loables y dignos de todo respeto, aunque insuficientes. Creo que en este sentido a ellos les hizo falta antes de realizar su convocatoria hacerse la pregunta Con quién y para qué. Quién lidera y cuál es específicamente la causa, nuestra manifestación va a servir para qué y quién se va a encargar de darle una utilidad. Ir a gritar a lo «pendejo» no creo que le quite el sueño a nuestro agresor externo y de la debilidad del gobierno mexicano, no sean ingenuos, ya tiene un reporte.

Algo que creo los «opinólogos» no han detectado es que muchos mexicanos ya detectamos desde dónde se construyó el discurso de odio (por lo menos el discurso de odio de que estamos siendo objeto en este momento) se construyó con medias verdades y por eso ha penetrado en por lo menos la mitad de toda una nación ¿alguno de ustedes vio que la sociedad norteamericana se manifestara en contra del muro como lo hizo con la prohibición de entrada a ciudadanos de siete países? Nadie tomó esa bandera dentro de la sociedad norteamericana. ¿Cuál es entonces la mitad de verdad de este discurso? Primero, desde que inició la migración ILEGAL de mexicanos hacia Estados Unidos ninguna administración ha movido un sólo dedo por evitar que  la gente salga del país. Hoy los migrantes son parte del botín político para el 2018 y entonces son tomados por los reflectores de muchas fuerzas políticas pero yo no conozco de ninguna política concreta que por lo menos menciones a la migración ilegal como uno de los problemas del país; tan es así que hoy por hoy la principal entrada de divisas a México son las remesas que envían quienes tomaron la decisión de rebasar por la derecha.

Quiero preguntar a todos los «opinólogos» si alguna vez han querido entrar a un país sin antes presentar un documento que avale su nacionalidad de referencia (pasaporte) y que la autoridad del país de destino autorice la entrada (visa). Creo que todos quienes tratamos de respetar la legalidad lo hacemos así, de lo contrario estaremos violando la ley internacional; por tanto, los mexicanos que por las razones que fueren (y quiero evitar el tema humanitario para centrarme sólo en cuestiones legales) deciden entrar a otro país sin realizar el trámite anterior y además, comprando identidades falsas en el país destino para poder ganarse la vida están violando la ley y además México está aprovechando la remesas. Esa es la verdad sobre la que se construyó un discurso racista, xenófobo, exagerado, demagógico y todas las características que ya conocemos. Y en ese discurso además, nos incluyen a todos los mexicanos incluso a quienes nos hemos quedado a «rifárnosla» en el país con todo y su infinidad de problemas.

Tengo una pregunta más. No he escuchado a alguien que asuma esta responsabilidad desde las élites intelectuales o académicas y por supuesto menos por parte del Gobierno Federal. Subrayo, no estoy culpando o juzgando a quienes deciden migrar del país pues todos sabemos perfectamente que lo hacen para hacerse de una forma de vida cuya posibilidad se ve obstaculizada dentro del país por la pobreza o por la violencia; mi señalamiento es específicamente para las élites que contrario a realizar un «acto de contrición» están buscando la manera de buscar eludir la responsabilidad de haber construido un país con tal desigualdad, tales niveles de corrupción donde ya es difícil y a veces imposible distinguir quién es el bueno del malo porque desafortunadamente estamos perdiendo la línea divisoria entre el delincuente y el defensor de la ley (asunto verdaderamente crítico para el que los instaría a convocar a otra marcha) que muchos prefieren irse e incluso prefieren vivir la persecución en Estados Unidos que regresar a México dándole la espalda a un país que antes se las dio a ellos.

Ante una amenaza monumental como muchos «opinólogos» la han calificado, ¿nuestra mejor opción es indignarnos en el Ángel de la Independencia escondiendo detrás de nuestra ofensa la defensa de la ilegalidad? Hoy con todo y nuestra ofensa no escucho a ninguna voz que diga: ¡hagamos lo que se pueda por los que ya se fueron aunque su agenda y sus objetivos sean muy distintos a la de quienes nos quedamos en México pero EVITEMOS QUE SE SIGAN YENDO! Nadie, absolutamente nadie está dispuesto a asumir la responsabilidad y no sé si porque es políticamente incorrecto decir abiertamente que México exporta migrantes ilegales y se beneficia con las remesas o porque nuestro Estado de Derecho es ya ta débil que preferimos el establishment de defender la ilegalidad.

Por lo pronto, a mi sí se me cae la cara de vergüenza y por eso no asistí a su marcha aunque sé que la amenaza exterior existe.

 

Rafael Redondo

@redondo_rafa

 

 


Image

 

   La tecnología nos ha otorgado el poder de asomarnos a los rincones más misteriosos del mundo con sólo deslizar nuestro dedo sobre una pantalla; sin embargo, la duda acerca de nuestra presencia en el planeta nos desconsuela. Nuestro tiempo nos ha regalado la posibilidad de estar en contacto con más personas y sin embargo, también nos revela el egoísmo de nuestros líderes y perdemos constantemente la confianza en los otros y la dirección en la vida. La información nos ha abierto la Caja de Pandora de los «placeres» a los cuales nos arriesgamos sin límite extraviados en un hedonismo que no parece tener fin; sin embargo, las enfermedades emocionales saturan los consultorios de los países cuyos habitantes deberían, al menos en teoría, gozar de cierta paz. ¿Lo tenemos todo y no sabemos disfrutarlo o en realidad cada vez tenemos menos?

La constante de nuestro tiempo creo, es la búsqueda desesperada por darle un sentido a nuestras vidas, el que sea. Para ello nos vamos a buscar en lugares exóticos rituales misteriosos. Insistimos en meter en nuestro pequeño cerebro la explicación más clara sobre nuestra verdadera identidad y visitamos al gurú famoso de cualquier tribu perdida pues la cultura nuestra, parece habernos defraudado. Nos dejamos seducir por cualquier sustancia que altere nuestra percepción para sentir algo y recordar que estamos vivos; la droga más alucinante, la experiencia sexual más arriesgada no importa cuánto daño traiga como consecuencia pero por favor, algo que regale un poco de placer. El entorno no ayuda mucho; la acumulación de la riqueza del mundo en las manos de unos cuantos nos ha robado la esperanza de que algún día nuestros sueños más simples como tener un trabajo digno y placentero, una casa, una familia se harán realidad. Ni el hambre es tan certera en asesinar como los ladrones de sueños. Si a todo ésto agregamos una de las más grandes carencias de la cultura occidental: no nos educan para el conflicto, para el dolor, para la muerte de la cual en occidente tratamos de huir, no existe, no queremos saber que el dolor es parte de la vida. Si a nuestros logros no les concedemos el esfuerzo (dolor) invertido en ellos, no tendrán ningún valor.

Hace algunos años fui testigo de cómo dos jóvenes sumergidos en adicciones salieron de su confusión primero, luego abandonaron los inhalantes en sólo dos meses. La receta fue muy sencilla, ambos fueron por voluntad propia y APOYADOS POR SU FAMILIA a convivir, uno de ellos con ancianos enfermos y el otro con perros enfermos. Ambas situaciones en apariencia nada agradables, rodeadas de dolor. En medio de esa situación dura, los dos muchachos descubrieron varias situaciones: Que la suya, no era la peor situación del mundo como ellos pensaban. Que eran capaces de sensibilizarse con la situación ajena, de sentir compasión y que experimentarla es un verdadero placer. Descubrieron que podían ser útiles. Se sintieron amados por esos seres quienes a final de la experiencia, resultaron ser sus salvadores. Uno de ellos fue muy explícito en el tema del afecto que experimentó; literalmente me dijo que lo que más le gustaba de ir a visitar a «sus viejitos» como él los llamaba, fue que nunca antes había sentido un «beso sin sexo». Él estaba convencido de que la gente besaba sólo por impulso sexual y no por cariño como lo hacían las ancianas cuando lo saludaban en el asilo.

La invitación es a que descubramos de nueva cuenta el valor que tiene el afecto en nuestras vidas, que ahí están muchas de las respuestas que tanto buscamos (no están en las tribus perdidas, ni en el cambio de alimentación, ni en las constantes visitas al psicólogo, ni en los antidepresivos necesariamente -a menos que se trate de una depresión severa que requiera de medicamentos- ni en los grupos de auto ayuda). El afecto está en nuestra familia, pareja, amigos, y sobre todo, EN LOS EXTRAÑOS QUE NECESITAN SIEMPRE DE UNA MANO. Debemos dar también su lugar al DOLOR en la vida porque a final de cuentas, el dolor es donde germinan los sentimientos más nobles.

 

Rafael Redondo

Back to basics


Image

 

  La vida es tránsito, nada permanece; lo único que permanece es el cambio y LAS ENSEÑANZAS. Nos damos cuenta que conforme pasan los años otra de las constantes es VOLVER AL ORIGEN: Buscamos «libertad» y nos alejamos de los grupos creyendo que seremos libres en la soledad, trotando mundo. Pasa el tiempo y descubrimos que vivir en ese tipo de libertad resulta desolador, que necesitamos de un grupo para satisfacer necesidades tan elementales como sentir que amamos y que nos aman; experimentamos la imperiosa necesidad de pertenecer y entonces, volvemos al origen. Optamos por hacer explotar nuestra capacidad y habilidades sexuales con quien sea y donde sea. Hacemos proselitismo sobre una sexualidad humana que no se restringe a una sola persona porque la sexualidad es un instinto animal. Pero cuando nuestro instinto trae consigo también el deseo de reproducción, nos damos cuenta que proteger a nuestros hijos implica también construir un nido (ojalá la gente se diera cuenta de éste asunto a tiempo y no haciera pasar a sus hijos por viajes verdaderamente desagradables por la inestabilidad psico-sexual de los padres; desafortunadamente sucede poco) y que una sexualidad dispersa es antítesis de la salud emocional de los críos. Si no me creen, imaginen lo que sentirían ustedes si en vez de conocer a un padre que se llama por ejemplo Luis tuvieran a digamos, diez de los amantes de su madre rondando por su cabeza preguntándose ¿quién de ellos es mi papá? O qué sentirían si a tu padre lo vieras cada vez que sus diez amantes, su trabajo, sus amigos y los partidos de futbol le dan el permiso para que tú al menos lo conozcas. De niños estamos hambrientos de seguridad así que si somos padres conscientes, volvemos al origen. Caemos en la trampa de que la tecnología nos hará súper hombres extendiendo nuestras frustrantes y limitadas habilidades humanas. El fenómenos se acentúa durante la revolución industrial y florece en el siglo XX donde en nuestro imaginario rondan los extraterrestres con tecnologías superiores a la nuestra, merodean los «robotes» y en el cine y la literatura es decir, las máquinas se adueñan del mundo. El ejemplo reciente es la falacia que nos vende la tecnología de la información: Conoceremos todo, nuestra sabiduría será infinita gracias a Google y seremos omnipresentes y hasta poseeremos múltiples personalidades gracias al fenómeno avatar; nos conocerá más gente, tendremos más amigos, más amores, más amantes. Análisis recientes sobre el fenómeno internet demuestran que al cabo de un viaje por el universo de la información, las personas terminan buscando su tribu, informándose sobre lo que les resulta útil, coincidiendo con gente similar, buscando espacios en los que nuestra presencia realmente impacte en el entorno y/o en las personas. Ni somos capaces de saberlo todo y menos de atender a los 4000 amigos en Facebook. Los amigos de verdad están en tus cumpleaños, en tus momentos más negros o en tus tardes aburridas. Volvemos al origen buscando las charlas de café o el abrazo de alguien real. Buscamos miles de romances sedientos por la persona más hermosa (¿se han dado cuenta que la persona más hermosa que ambicionamos, nunca llega? No llega porque nuestra ansiedad nos lleva a buscar a la persona más… a la persona más… a la persona más… y en esa vorágine perdemos de vista a la persona que estábamos buscando) y reventamos la satisfacción biológica que es tan fugaz como la pirotecnia. Cuando descubrimos que el amor de pareja en realidad significa apoyo, aliento, complicidad, nuestro espejo donde podamos ver nuestros errores, una buena conversación, amistad, sueños en común es entonces que abandonamos los devaneos y ansiamos la monogamia. Volvemos al origen. Incluso la globalización termina siendo una falacia; no es lo mismo México que Canadá, ni es lo mismo Inglaterra que Turkía. Incluso no es lo mismo Nuevo León que Chiapas, ni es lo mismo Tabasco que Jalisco.
La exploración es un placer y perder ese placer sería penoso; pero, sería también ideal no confundir la exploración con fantasías de estados y mundos inexistentes. La propuesta es disfrutar cada descubrimiento durante ese proceso de exploración para no perder la dirección hacia los verdaderos placeres. Si estás extraviado en el camino la invitación es, BACK TO BASICS (volver a los esencial).
 

La empatìa…


 

Cuando cada uno de nosotros los humanos llegó a este mundo, nuestra única esperanza de plenitud, nuestro único refugio son papá y mamá. Ellos son nuestro hogar y no me refiero al espacio físico sea éste un palacio o una choza. Papá y mamá son nuestros proveedores ante nuestra incapacidad de autosatisfacernos, nuestra protección, ellos son nosotros mismos hasta que cobramos consciencia de nuestra individualidad. Nuestros padres son la extensión de nosotros, sabemos  lo qué somos reconociéndonos en ellos. Este vínculo nos convierte en seres empáticos capaces de experimentar dolor o alegría a través de ellos, a través de otros. Esta relación tan estrecha será fundamental para dibujar nuestro comportamiento en sociedad.
 
Dado que el ser humano es gregario es un ser social diseñado para sobrevivir únicamente inserto dentro de un grupo y que para lograrlo es fundamental poner en práctica nuestra capacidad empática, entonces si esta capacidad se aliena, nuestra relación con el grupo se verá lesionada.
 
Cuando papá y/o mamá hacen un buen trabajo para mantener un lazo afectivo sólido con los hijos, ellos serán capaces de lograr una convivencia sana dentro de su grupo; con ésto no quiero decir que el conflicto no vaya a existir jamás sino que estos seres humanos serán seres sociales que mantienen el mínimo respeto por sus iguales y por consecuencia por la vida en general (somos seres vivos y nos reconocemos también en toda forma de vida). Puede ser que solamente la mamá o solamente el papá se encuentren solos haciendo su trabajo con los hijos, puede ser incluso que un buen día papá y mamá desaparezcan por la razón que sea pero si su trabajo fue bueno, estuvo regido por el amor, los hijos en la ausencia o el recuerdo continuarán poniendo en práctica su capacidad empática.
 
¿Qué puede hacer que esa capacidad empática se inhiba? Cuando la relación afectiva no existe; puede ser que papá y/o mamá estén presentes siempre y los hijos sean seres en quienes la empatía desapareció.
 
Una mujer que se embaraza de manera irresponsable tiene muchas posibilidades de convertirse en una madre irresponsable, que no provee de afecto, que nunca se convierte en el hijo condición indispensable para que el niño ponga en práctica la empatía. Una madre golpeada y humillada, un padre borracho, golpeador, irrespetuoso. Una madre que exhibe su sexualidad con múltiples personas frente a los hijos (una mujer que seembaraza de varios hombres todos ausentes es un buen ejemplo), un padre que hace alarde de su lascivia frente a los hijos. Estas conductas son interpretadas por los menores como invasiones a ellos mismos (insisto en una etapa temprana los hijos no establecen diferencia entre ellos y los padres), agresiones, dolor.
Cuando el niño empieza a utilizar su razón el daño emocional ya está hecho y si aún así los padres no retoman el camino y muestran sus incongruencias de comportamiento frente a los hijos el daño se incrementará. Por ejemplo, padres profundamente morales (en general escudándose detrás de alguna doctrina religiosa) que en su vida diaria no respetan esos postulados que pregonan, un caso típico es el del hombre-macho mexicano que es muy católico porque se hinca frente a la imagen religiosa, se da golpes de pecho y por otro lado hace alarde de los cientos de mujeres que «se cogió» y de los hijos que procreó fuera del matrimonio; que detesta a los homosexuales por que la iglesia lo dice pero que pasa más horas con sus amigos hombres que con su esposa o hijos. Incongruencia. La madre que reza día y noche y toda conducta que a ella y a la iglesia le parezcan equivocadas son sentenciadas con un boleto directito al infierno, pero que permitió que a su vida la conduzca la sumisión, soportando humillaciones, golpes, vejaciones y que le sea robada su vida sexual porque una mujer buena no siente placer sexual; toda esta represión convierte a la madre en una olla de presión a punto de estallar construyendo una vida de amargura que va a caer sobre los hijos. Incongruencia.

Basta hacer un ejercicio de imaginación para experimentar cómo se lesiona la empatía en nosotros. Hagan este ejercicio. Imagínense a ustedes mismos a los cinco o seis años sentados a la mesa listos para los alimentos. Imaginen a su madre amargada que los obliga a comer verduras mientras ella come papas fritas llenando su cuerpo obeso y flatulento de grasa. Tocan a la puerta, su madre abre y ustedes miran cómo el vecino le toca los senos vulgarmente a su madre y ella parece disfrutarlo. De pronto llega su padre borracho quien viendo la escena anterior se va a golpes sobre su madre haciéndola rodar por el suelo cubierta de sangre. Su padre borracho exhibe frente a ustedes sus genitales y… BASTA. Esa sensación que experimentaste es EL ASESINO DE LA EMPATÌA. El sentimiento es tan desagradable que nos da deseos de desaparecer, de no estar, de huir. Nosotros sólo estamos imaginando y nos resulta repugnante, un pequeño que vive agresiones similares desea NO SER.
 
De esta manera asesinan el padre y la madre la capacidad empática de los hijos condenándolos no sólo a la incapacidad de sobrevivir de manera sana dentro de un grupo, también los condena a la amargura, a la incapacidad de dar y recibir amor. HIJOS SOLOS pues no saben relacionarse en ningún plano con nadie aunque muchas veces finjan tener miles de amigos (los individuos «amigos todo el mundo» son un síntoma de soledad; nadie es capaz de llevar una amistad o relación emocional auténtica con mucha gente al mismo tiempo, es imposible y transforma en baratija el valor de la amistad-amor auténtico). HIJOS FRUSTRADOS pues el máximo placer humano es dar y recibir amor; si no sé cómo se hace, soy infeliz y me frustro. Esta combinación de SOLEDAD-FRUSTRACIÓN puede ser letal, de hecho lo es.
 
En qué se convierte una persona con la empatía mermada:
1.- Nivel uno, el más ligero, en seres incapaces de hablar con sus iguales así que mejor NOS ESCONDEMOS DETRÁS DE ROPA DESAGRADABLE, DETRÁS DEL CABELLO QUE NOS CUBRE EL ROSTRO, SENTIMOS QUE EL MUNDO ESTÁ COMPLOTEANDO CONTRA NOSOTROS Y LLORAMOS ESA DESDICHA;  HUMANIZAMOS PERROS O NOS ENCERRAMOS EN LA FATUA VIDA VIRTUAL DE LAS REDES SOCIALES, ESCLAVIZÁNDONOS A UN GADGET. ¿Les suena conocido?
2.- Nivel dos, como mi mundo es detestable, me fugo EMBRUTECIÉNDOME CON DROGAS O ALCOHOL. Sólo con drogas digo lo que siento, sólo con drogas siento placer sexual, sólo con drogas soy capaz de sobrevivir en el mundo que me parece aterrador.
3.- Nivel tres, el más grave. Como el mundo en el que vivo no sólo es aterrador, también me hace daño entonces tengo dos opciones: ME DESTRUYO (suicidio) o LO DESTRUYO. La soledad-frustración convertida en IRA nos lleva a conductas anti sociales: El despojo de un bien, de un afecto, de una vida hacia los otros. Atentamos contra todo lo que tenga vida porque no reconocemos valor en ella. La vida en plantas, la vida en animales o la vida en personas no tiene valor alguno. Tampoco tiene valor nuestra propia vida.
 
Analicemos cómo se comportan nuestros hijos y cómo nos comportamos nosotros mismos (no en vano vivimos en una cultura donde las neurosis son y serán cada vez más las protagonistas en nuestras sociedades). Arriesguémonos a experimentar QUÉ SENTIMOS CUANDO NOS RELACIONAMOS CON LOS DEMÁS, CÓMO NOS RELACIONAMOS CON LOS DEMÁS. Debemos ser honestos y si sentimos odio, miedo, depresión, desilusión, nada, reconozcámoslo para entonces poder modificar nuestro comportamiento. Una buena manera de recuperar el camino es ACTUAR EN BENEFICIO DE DESCONOCIDOS, el altruismo bien entendido (no se trata de dar limosnas, la más burda expresión de este asunto) puede regresar ante nuestros ojos el afecto que podemos obtener de personas que no tendrían necesidad de amarnos (no son nuestra familia). Las plantas y animales son otro de los caminos, son vida como nosotros y son capaces de devolvernos amor a raudales. Lo más importante es RECONOCER la situación de nuestra empatía y después armarnos de voluntad para recuperar el placer por la vida,  nunca es tarde para reconstruirnos y tampoco es imposible.
 
 
Rafael Redondo
 

Twitter: redondo_rafa

Tù, ¿què droga te metes?


Image

  Las sustancias que alteran nuestros sentidos se han utilizado desde tiempos ancestrales como instrumento catártico; en la religión y/o en la salud. Los hay desde los naturales como ciertos tipos de hongos o cactus, hasta los fermentos que dan como resultado sustancias alcohólicas.

El la actualidad tal parece que tanto el alcohol como las drogas se han convertido en una muleta para continuar con nuestras vidas las cuales tal parece, son tan frustrantes y aterradoras que es necesario un estímulo ficticio para poder sobrellevarlas. Cuántas veces has escuchado estas frases: -No mames, me puse una mega peda y terminé manejando en sentido contrario en el periférico, jajajajajajaja-, -Qué pedo, con la peda impresionante que me puse ayer terminé en la casa de no sé quién y cogiendo con tampoco sé quién, jajajajajaja- El «jajajaja» es indispensable para darle un tono divertido a nuestra anécdota o «chic» a nuestra aventura  o para ddeclarar (a nosotros mismos, porque lo cierto es que nadie más le importa)  «mi vida es muy interesante» y «existo» y merezco el reconocimiento de la gente que me rodea.

Ya estar alcoholizado para tener motivos de pseudo felicidad es patético (bebo entonces, me divierto; bebo, entonces soy interesante; bebo, entonces soy aceptado). Sin embargo, tal parece que la frustración crece en función de la incapacidad humana para construirse motivos de felicidad pues a pasos agigantados el consumo de sustancias va no sólo popularizándose, también proporcionalmente el poder de las sustancias se va incrementando. Hoy el más «nerd» usa marihuana y/o cocaína. Ya los más «chic» le entran a las drogas de diseño (Dicho sea de paso, de dudosa procedencia. No he sabido que ningún laboratorio prestigiado se responsabilice de las sustancias que las componen) y muchos usan desde anestésicos para gatos, para humanos y/o para caballos; hasta solventes (lo «inn» entre ciertos grupos por cierto). Hoy, la presión social para que BEBAMOS está mutando al ¿Y TÚ QUÉ TE METES? como si fuera obligación.

La presión social es fuerte y hay que serlo más para aprender a sobrellevarla (yo sé de lo que hablo) y aunque tengo claro que detrás del uso de cualquier sustancia de manera irresponsable hay un problema emocional perfectamente definido, el asunto es que la puerta de entrada a las sustancias está disfrazada de NECESIDAD DE ACEPTACIÓN, HAMBRE DE PERTENENCIA, ANSIEDAD POR GENERARSE ALGÚN TIPO DE VALOR EN UNA PERSONA QUE CREE QUE NO TIENE NINGUNO.

En el caso específico de México, somos testigos de la sangre que se ha derramado por motivo de las drogas y escucho a mucha gente QUE CONSUME SUSTANCIAS alzarse como la más indignada ante la violencia pero no es capaz primero, de reconocer que TIENE UN PROBLEMA EMOCIONAL y luego, QUE SU CONSUMO DE SUSTANCIAS ES RESPONSABLE DE UNOS BUENOS LITROS DE LA SANGRE DERRAMADA EN EL PAÍS.

Cada quién sabe lo que hace con su vida pero creo que si nuestras acciones se llevan a mucha gente «entre las patas», deberíamos meditar dos veces cuando alguien nos pregunte, Y tú, ¿qué te metes?

La Lola…


  La Lola es una perrita hija de la amorosa pareja de Gonzalo y Jimena. Lola fue adoptada hace dos años y llegó a reforzar el amor en este hogar que luego de 20 años de matrimonio y una decisión de evitar los embarazos estaba a punto de derrumbarse. En dos años Lola logró reintegrarse a la sociedad, llenó de ternura, travesuras, lealtad, juego, sorpresa, pelos y a veces caca la casa de Gonzalo y Jimena. El enorme amor que provoca la Lola en esa casa la ha hecho merecedora de todo tipo de ventajas: tiene su propio clóset repleto de ropa con modelos que van desde un collar con brillantes auténticos hasta patunflas para los días lluviosos en la ciudad de México. Tiene reuniones con amigos cada sábado y vacaciones pagadas en un spa canino que a los dueños les cuesta un ojo de la cara. Tiene a su mejor amiga que es hija de otra pareja, la de Reynaldo y Paulo y ambas tienen su cita con la nana durante el día para que no se estresen en la soledad del departamento donde viven. Suponemos que la Lola y Renata (su canina amiga) cuando están juntas hablaran de moda, leerán la revista Caras u Hola y criticarán a Paris Hilton. Lo que ninguna de las dos tiene es un macho que en algún momento les hiciera experimentar la reproducción pues ambas están esterilizadas y nunca tuvieron la dicha de ser madres.

Está claro que todo ser vivo merece RESPETO y que todas las formas de vida en el planeta se relacionan de una u otra manera así que respetar  un árbol, al mar, a los insectos significa respetarnos a nosotros mismos pero, tratar de mimetizar, transformar a un ser en lo que no es, ¿es respetarlo? Yo no estaría muy seguro si la Lola y su amiga son más felices convertidas en Barbies de carne o revolcándose en un charco de lodo, tampoco estoy muy seguro si el indiscutible AMOR que nos inyectan los animales sea bien comprendido por Gonzalo y Jimena ni por Reynaldo y Paulo pues de ser así, no obligarían a Lola ni a Renata a cumplir roles para los que no están diseñadas.

Creo que este es un tema a reflexionar ahora que existe ya un día del perro en México.

 

Rafael Redondo

Twitter: @redondo_rafa

 

Lupita…


  Ayer en el supermercado frente a mí en la línea para pagar conocí a Lupita. Lupita trabajadora doméstica indígena, no tiene ningún dedo en la mano derecha. Hice conversación con ella ayudándole a cargar las bolsas de sus compras hasta el estacionamiento donde la esperaba su «patrona». Lupita nació en Ixmiquilpan, Hidalgo. Sólo tiene autorización de ir a ver a su familia cada quince días en su domingo libre y así llevarle un poco de dinero a sus papás. Lupita tiene veinte años y perdió sus dedos a los dos años por la mordida de un perro. Toda esta información la obtuve en una breve charla con ella camino al estacionamiento donde la «patrona», una mujer de clase media, joven, morena de pelo extra rubio teñido la esperaba sentada fumando dentro de un coche. Cuando llegamos Lupita y yo la mujer estaba molesta, le gritó que apenas tenían tiempo para llegar por los niños y que se diera prisa para subir las bolsas. Cuando Lupita se dio la espalda, la «patrona» me dio las gracias y concluyó -Estos pinches indios no sirven para nada!-. Yo le respondí, -Pues tú sin el tinte bien podrías ser su familiar-.

Esta actitud abusiva, racista, discriminatoria y ridícula es muy común en México y es una muestra además, del profundo individualismo en que vivimos sumergidos. Individualismo que se hace patente en las voces que en periodo electoral critican al 20% de gente que se interesa por asuntos políticos pues sabe de las repercusiones de no hacerlo: no cambiarán nuestra vida pero va a influir en ella. El mundo de los APÁTICOS clama NINGÚN POLÍTICO CAMBIARÁ NUESTRAS VIDAS, SEREMOS NOSOTROS MISMOS CON NUESTRAS BUENAS ACCIONES QUIENES DE VERDAD CAMBIAREMOS A MÉXICO. Yo les preguntaría a los APÁTICOS, ¿y qué están esperando entonces para hacerlo?, ¿por qué entonces tenemos a un México con 60,000,000 de pobres, cerros de asesinatos, la violencia más irracional que hayamos visto nunca, un racismo tan patético como el que acabo de describir y otros tantos pendientes? De ser cierta su premisa, ¿no les parece que han hecho un pésimo trabajo con todo y sus buenas intenciones?

Indudablemente no ejercitar nuestra capacidad empática, optar por el individualismo, la tenacidad con la que nos oponemos (o se oponen, yo sinceramente me excluyo) al trabajo en equipo nos hace creer que estamos muy lejanos al mundo de Lupita pero EN UN IMPERIO DEL INDIVIDUALISMO, TODOS SOMOS CANDIDATOS A TOPARNOS CON UN PEZ MÁS GORDO QUE NOSOTROS Y ENTONCES SABREMOS EL SIGNIFICADO DE ESTAR COMPLETAMENTE SOLOS.

 

Rafael Redondo

Twitter: @redondo_rafa


ImageL

 

Juana y Armando, una pareja de indìgenas de la sierra de Oaxaca tomaron la decisiòn de abandonar su condición de miseria y ofrecerles a sus hijos Estela y Agripìn una mejor vida en la ciudad de México. Fue asì que llegaron a vivir en una construcción de lámina que les consiguieron los amigos de un pariente en Chalco. Armando se colocó como jardinero en la casa de un político en Polanco mientras Juana vendía esquites afuera de una panadería del barrio. Su vida en Chalco no era nada grata, todos los rechazaban por «indios», Estela se refugió en la televisión mientras Agripín se convirtió en el «mandadero» de una pandilla de delincuentes que no tardaron en cargarle culpas y pronto fue a dar a la cárcel. Estela por su lado se veía tan lejana a sus sueños de parecerse al menos un poco a la gente que sale en la televisión que en meses era adicta a los solventes. La situación económica era terrible pese al lujo en que vivían los patrones de Armando quien se había dado cuenta que el propietario de la casa por un lado defendía necesitados y por otro los despojaba de terrenos en zonas marginadas a cambio de tremendos pagos por parte de grupos fraudulentos. ¡Es un ladrón este hombre y anda como si fuera una persona decente!. Juana y Armando vivían una situación desesperada, con poco dinero, una casa prestada, el rechazo de lagente por su raza, un hijo en la cárcel y una hija adicta. Un día en un arranque, Armando decidió robar la casa donde trabajaba, fue sorprendido, acusado (con mentiras) de intento de asesinato, en colusión con los medios fue presentado como un abominable asesino y recibió una pena que desde luego no merecía. Juana decidió regresar con su hija enferma a su pobreza inicial, sin esperanza y con la vida destruída.

Esta historia es real, fue una de tantas que he escuchado en mi vida profesional. Muchas historias que dan cuenta de las terribles rupturas en el tejido social debido a factores que nunca son tangibles, no se contabilizan pero esos entes ESTÁN: JUSTICIA, IDEA DE CONSTRUCCIÓN DE COMUNIDAD, FRUSTRACIÓN, AUSENCIA DE HONESTIDAD, LEALTAD, PREJUICIOS, CORRUPCIÓN, RACISMO, FALTA DE COMPASIÓN, ENOJO. Todos estos elementos al ser intangibles caen en el terreno de lo moral (que no moralina), no pueden meterse en estadísticas pero EXISTEN, COHESIONAN GRUPOS SOCIALES Y POR TANTO FORMAN PARTE DE LAS RESPONSABILIDADES DEL ESTADO (por cierto, también ente intangible).

Hablar de RECONSTRUCCIÓN MORAL de la que tanto se burlan analistas y comunicadores no se trata de ir a misa todos los domingos, eso es moralina. Estos factores deben tomarse en cuenta y en serio para poner aniquilar los terribles malestares que padece México. Es en este terreno que germina la violencia. Yo te invito a que lo medites  no importa si tu situación social y económica es confortable y creas que no hay que preocuparse por esa gente «india», «fracasada», «jodida» como he escuchado tanto últimamente. Tarde o temprano esos errores responsabilidad de TODOS se reviertirán contra tí también.


Image

 

  Sin lugar a dudas el instrumento más sofisticado creado por el ser humano (al menos conocido hasta la fecha) es la TECNOLOGÍA DE LA INFORMACIÓN y su acelerada evolución continuamente nos deja sorprendidos por sus repercusiones.

Recientemente en México con el desarrollo que ha tenido la campaña por la Presidencia hemos sido testigos de la dependencia hacia la televisión que tiene nuestra cultura, del enorme poder que tiene este medio en México pero también del reto que está representando para los medios de comunicación tradicionales  (televisión) adaptarse a las nuevas formas que utilizamos los seres humanos para ponernos en contacto.

Hemos escuchado a Carlos Loret de Mola minimizar la presencia de Twitter (y sus usuarios) en la realidad nacional; a Leo Zuckermann, Héctor Aguilar Camín y Jorge Castañeda llamar a los usuarios de las redes como una especie de alienados que viven en una realidad paralela pues las encuestas acerca de las preferencias electorales (SUS ENCUESTAS) no reflejan el sentir de la gente que «VIVE» (una vez más, como si lo virtual fuera un mundo extraído de la realidad, el reino de la esquizofrenia) en las redes sociales. Yo adjudiqué al principio estas opiniones a la ignorancia y el bajo perfil de la gente de la televisión respecto a sus conocimientos y apreciación de la nueva realidad de la información y sus desplazamientos. Después escuché opiniones acerca de un intento anacrónico de manipulación política a través de la televisión tesis que cada vez se hace más evidente; pero lo cierto es que muchos «editorialistas», «comunicadores» y «analistas» inmolaron su credibilidad ya sea por ignorancia o por obedecer a intereses personales (fuera de toda ética por cierto).

El movimiento YO SOY 132 (jóvenes, universitarios, frescos en el conocimiento, sin compromisos  propios de la edad adulta y además, al día en cuento a nuevas tecnologías se refiere) hoy levantan la voz para subrayar que los alienados parecen ser los que se quedaron atrás, en la prehistoria de la comunicación; su desconocimiento acerca de que LA INFORMACIÓN YA NO ES UNA NUBE (COMO SE LE SUELE LLAMAR AL FENÓMENO) DONDE UN INDIVIDUO TIENE ACCESO A UN CÚMULO INFINITO DE INFORMACIÓN AUNQUE, RESPONDIENDO A INTERESES MUY SUBJETIVOS. LAS REDES SOCIALES HAN SIDO UN CATALIZADOR PARA TRANSFORMAR EN MULTI-VECTORIAL LA DIRECCIÓN DE LA INFORMACIÓN  Y CON UN PESO ESPECÍFICO; ES DECIR, EL INDIVIDUO NO SÓLO CONOCE LA INFORMACIÓN QUE  SUS IMPULSOS LE INDICAN, AHORA SE VE DETERMINADO TAMBIÉN POR LOS IMPULSOS DE OTROS Y ADEMÁS, LOS EFECTOS DE ESTE INTERCAMBIO HAN REPERCUTIDO DE MANERA CONTUNDENTE PARA MODIFICAR LA REALIDAD POLÍTICA Y SOCIAL DE PAÍSES DICTATORIALES, DE SOCIEDADES TAN TRADICIONALES COMO LAS DE EGIPTO Y LIBIA. Es decir, la información y su capacidad de movilización social ya transforma la realidad. Yo no llamaría nube al fenómeno sino MAR, con densidad propia y que permea nuestras actividades y además, YA NO ES PROPIEDAD PRIVADA. En ese mar de información son muy útiles las referencias (ESPECIALISTAS EN TEMAS, INVESTIGADORES, QUE CON RIGOR METODOLÓGICO Y ÉTICA INDISPENSABLES PUEDAN CONVERTIRSE EN FAROS PARA NO EXTRAVIARNOS EN «TODO LO QUE SE DICE») pero, la información ya no puede tener propietarios que traten de detener tsunamis.

Como toda creación humana tiene sus demonios; el principal que este instrumento maravilloso queda sin vida tan sólo con un apagón eléctrico pero, la televisión padece del mismo mal.

 

RAFAEL REDONDO